Uno y ninguno.
Cargo desde hace tiempo con mi rostro pegado al cráneo y mi sombra cosida a los pies, y todavía no he logrado comprender cuál de las dos cosas pesa más. Aunque a veces experimento el impulso irrefrenable de despegármelos, colgarlos en un clavo y quedarme allí, sentado en el suelo, como una marioneta a la cual una mano piadosa ha cortado los hilos...
7 Disquisiciones :
y aun más cuando duerme?
jajaj la verdad la física no es lo mio, vieras como me parto con cada examen jajaja :(
(me acabo de dar cuenta que no sé por qué a estas alturas aún te sigo si eres un encanto de blog me reivindicaré)
Tan típico y tan entrañable al mismo tiempo...
Tan vivo como si hubiera ocurrido ayer.
Las miradas a tientas son las que mejor ven.
Un beso
Qué genial ;D
ME HE QUEDADO CON LA SENSACIÓN QUE PODRÍAS HACER MÁS X TU BLOG, NO ESTÁ BUENO PERO TIENE POTENCIAL.
Eso es el amor. Y el amor es movimiento con rozamiento. Todo tiene consecuencias, pero a veces merecen la pena, ¿no?
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